JUEGOS DE ESPACIO

“Raíces”
Tipo de juego: Espacial.
Número de participantes: Ilimitado.
Edad adecuada: De 3 a 6 años.
Duración: Lo que se quiera.
Espacio adecuado: Lugar amplio.
Material necesario: Ninguno.
Desarrollo del juego: Tres niños se dirigen al centro del espacio de juego y, abrazados entre ellos en círculo, simulan ser un tronco de árbol. ¡El tronco debe mantenerse muy quieto!
Otros tres participantes se colocan tumbados boca abajo en el suelo, con la cabeza tocando la base del árbol y en diferentes direcciones, porque son las raíces.
Lentamente, seis niños más se agarran, también tumbados, a los pies de las tres primeras raíces. Y otros, a estos seis, y así sucesivamente. Se forman de esta manera filas de niños tumbados: son raíces de árbol que van creciendo.
Actividad que promueve en el niño: Desarrolla la estructuración espacial y su ocupación. Trabaja también la imaginación.
Valores que transmite: Que la unión es importante para crecer y progresar.
Observaciones y adaptaciones: no se observan


“La boca del payaso”
Tipo de juego: Espacial.
Número de participantes: Ilimitado.
Edad adecuada: De 0 a 3 años.
Duración: Lo que se quiera.
Espacio adecuado: Lugar amplio.
Material necesario: Una caja grande de cartón, rotuladores, tijeras (para el educador), pinturas de colores y pelotas pequeñas, bolsas de legumbres, esponjas o calcetines enrollados.
Desarrollo del juego: Se dibuja una cara de payaso con las pinturas en una caja grande de cartón. Se hacen dos grandes ojos y una gran boca que posteriormente se recortan. Pintamos todo el payaso con los niños.
Una vez acabado de pintar, se coloca el payaso inclinado contra una pared.
Los niños se ponen en fila y, por turno, van tirando las bolas por la boca. Cuando tengan cierta práctica lo intentarán por los ojos.
Actividad que promueve el niño: Desarrollo de las relaciones espaciales, coordinación oculo-manual y desarrollo de las motricidades fina y gruesa. En la elaboración de este también se desarrolla la expresión.
Valores que transmite: Respetar y ayudar a los demás.
Observaciones y adaptaciones: En lugar de un payaso se pueden hacer varios agujeros de diferentes tamaños para que los niños consigan puntos en función del tamaño del agujero.


“Lazarillo”
Tipo de juego: Motor, de interacción social y de reglas.
Número de participantes: Indefinidos por parejas.
Edad adecuada: 3-6 años.
Duración: 5 minutos aproximadamente.
Espacio adecuado: Ha de ser un lugar espacioso.
Material necesario: Una caja de cartón, una pelota pequeña, cuatro sillas y un pañuelo para vendar los ojos.
Desarrollo del juego: Uno de los niños se sienta en el suelo, se le tapan los ojos y se le entrega la pelota. Su pareja reparte las cuatro sillas en fila, dejando espacio entre ellas. Al final de las sillas se coloca una caja de cartón abierta.
El niño que tiene los ojos vendados simula ser un ciego y el otro es su lazarillo, su guía.
A una indicación del educador, el guía, a cierta distancia y mediante palabras, dirige al ciego que se ha levantado y que debe andar hasta llegar frente a la caja de cartón sorteando las sillas.
El juego finaliza cuando el guía consigue que el niño con los ojos vendados llegue a la caja de cartón y lance la pelota dentro.
Actividad que promueve en el niño: Motor, lógico, verbal y relación espacial.
Valores que transmite: Empatía, compañerismo, competitividad si se forman dos equipos, afán de superación si se cronometra.
Observaciones y Adaptaciones: Para adaptarlo a niños/as más pequeños habría que simplificar lo obstáculos


“Juego de Bolos”
Tipo de Juego: Es un juego de reglas espacial ya que cada jugador debe saber las instrucciones del juego, a la vez también podríamos decir que es de interacción social.
Número de Participantes: No hay un número determinado de participantes.
Edad Adecuada: A partir de los 24-30 meses.
Duración: Depende del número de participantes del juego.
Espacio Adecuado: Se puede realizar tanto en un espacio cerrado (una clase, la sala multiusos...) como en un espacio abierto (el patio de la escuela...)
Material Necesario: Necesitamos aproximadamente 6 botellas de leche vacías, un balón blando y bien o una cuerda o una cinta adhesiva.
Desarrollo del Juego: Se colocan los 6 bolos en forma de triángulo, se traza una línea para tirar los bolos, se sitúan a todos los niños detrás de la línea formando una fila, cada niño lanza la pelota contra los bolos para derribarlos; por último se colocan de nuevo los bolos para el siguiente jugador.
Actividades que promueve en el niño: Favorecen la relaciones espaciales que el niño tiene con el espacio en el que se desenvuelve, la actividad manipulativa, favorece también el desarrollo de la motricidad gruesa, la relación entre causa- efecto y la coordinación óculomanual.
Valores que transmite: Favorecen la convivencia, las relaciones afectivas y la educación ambiental.
Adaptaciones y observaciones: Otra variante de este juego podría ser con fichas de dominó, colocándolas en fila y golpearlas con una pelota de goma pequeña causando el efecto dominó.


“¡Un fantasma!”
Tipo de juego: de espacio, motor.
Número de participantes: ilimitado
Edad adecuada: de cero a tres años
Duración: diez minutos aproximadamente
Espacio adecuado: amplio
Material necesario: una tela grande y música.
Desarrollo del juego: El educador extiende la tela en el centro del terreno de juego.
Los participantes están sentados en un extremo, se levantan y rodean la tela.
A una orden del educador, la agarran y la levantan medio metro del suelo. ¡Sin soltar la tela!.
Cuando la música suena, los niños se mueven con la tela por todo el lugar.
Al para la música, se esconden rápidamente debajo del tejido, agachados.
Cuando vuelve a sonar la música, caminan con la tela en la espalda.
Actitud que promueve: relaciones espaciales y motor.
Valores que transmite: manipulación de objetos que favorecen el descubrimiento de diferentes posiciones y direcciones, y de los conceptos “dentro” y “fuera”.

Bibliografía: Título: Juegos de espacio.
Autor: Jordina Ros y Sonia Alís.
Año: 2001.

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